La alegoría de Gran Hermano

Por Lic. Eduardo Rivas – Como si fuera parte de una entrega más de la emisión televisiva de Gran Hermano, la Municipalidad local difundió días atrás en su cuenta de Facebook un video tomado por las cámaras como colocadas en diferentes puntos del Distrito demostrando cómo por su accionar  logra detener a un joven que había robado un teléfono celular. Sí, las mismas cámaras de seguridad, que no ayudaron a esclarecer un robo perpetrado a doscientos metros del Palacio municipal demuestran ahora su efectividad.

Pero si uno lee con detenimiento el comunicado oficial verá que en realidad, al igual que en Gran Hermano, lo que se muestra no es todo lo que pasa sino sólo lo que se quiere mostrar, veamos el porqué de esta afirmación.

Afirman los funcionarios municipales que tras la visualización del ilícito perpetrado en horas del mediodía en Bolívar y 9 de julio desde la sala de monitoreo, se da inicio al protocolo de intervención, alertando a los móviles disponibles de DPU, CPC y UPL, y que el delincuente es visto minutos más tarde por la cámara ubicada en ‘San Martín y Belgrano, y posteriormente, en la ubicada en Justa Lima e Independencia, circulando por esta última’. Si es como se cuenta, ¿puede un delincuente atravesar el centro de la ciudad sin ser localizado y detenido? Si el ilícito ocurrió como y cuando dicen que ocurrió, resulta llamativo que el escape, el malhechor lo haga por medio de la zona más custodiada de la ciudad, puesto que en su afán de hacer como que se hace, pretendiendo mostrar una realidad virtual que logre imponerse por sobre la realidad real, el centro local en horas del mediodía, dada la actividad comercial y bancaria, es la que más efectivos policiales de las diferentes fuerzas concentra. Tras el ilícito el delincuente recorre 9 cuadras en dirección al centro y no se puede prever su recorrido para interceptarlo ni establecer contacto radiofónico con las fuerzas de a pie para lograr su detención, resulta un tanto inverosímil.

Pero por si esto fuera poco, el cuento (porque a esta altura del texto queda claro que más que un comunicado de prensa es algo parecido a un cuento para niños) afirma que el caco ‘finalmente, es interceptado por agente de DPU en cuadriciclo con apoyo de un móvil de Policía Local en Independencia y Ubaldo Fernández’, lo cual no deja de ser sospechoso, puesto que eligió huir por un camino en el que se topaba con el Club Central Buenos Aires y, por ende, reduciendo en un 33% su posibilidad de huida. Sin ser delincuente, uno imagina que si busca huir, lo hace hacia donde tenga más opciones para elegir y no dónde estas se reducen. Y sumando aún más dudas, tras la aprehensión del sospechoso, ‘se realizan las formalidades de rigor y se procede a devolver el celular sustraído a los damnificados, que aún se encontraban en el mirador’, lo cual no sabemos si se debe, a que quedaron inmóviles por el atraco, a que se quedaron esperando el regreso del caco, para devolver lo sustraído o los cautivó la vista del río.

Es claro que el Municipio pretende mostrar una realidad inexistente y busca hacerlo apoyándose en la labor de las cámaras, exhibiendo que éstas ven todo, pero en realidad sólo ven lo que se quiere ver y se muestra lo que se quiere mostrar. Está en los ciudadanos el exigir que se nos muestre la realidad real o pretender seguir viviendo como en la caverna de Platón, sólo mirando hacia dentro viendo los reflejos de la luminosidad, sólo viendo lo que se nos quiere mostrar.

Finaliza el texto afirmando que ‘queda evidenciado la coordinación interna de la Secretaría de Seguridad Ciudadana con UPL y CPC, resultado de la reestructuración operativa y optimización de recursos ejecutados por disposición del Intendente Osvaldo Cáffaro’… más allá de la mala redacción de la publinota, si esta situación se evidencia por el video exhibido queda en evidencia que la labor no sólo es limitada y pobre sino de escasa efectividad, los hechos de inseguridad que viven a diario los vecinos zarateños  así lo demuestran, aunque nos quieran mostrar otra realidad, la municipal: Una realidad virtual.